jueves, 28 de abril de 2011

Los cien años de Efrain Boglietti

EL GRAN GESTOR DE UTOPIAS REALIZABLES
EFRAIN BOGLIETTI
(Rosario 1911 – Resistencia 1991)


Pensador, empresario de la aviación, gestor cultural, bon vivant, seductor empedernido, enamorado del Chaco.
Uno de los hombres claves para entender el potencial cultural de nuestra provincia. Cumpliría el 3 de abril de 2011, sus primeros cien años.



Creo junto a su hermano Aldo, y el escultor Juan de Dios Mena, una de las instituciones culturales del Chaco, mas conocidas en el país y el mundo, dedicada al disfrute de la amistad y el arte, El fogón de los arrieros (1954)

Ambos hermanos eran una usina de ideas, un dúo indestructible, nada se hacia sin el apoyo y consentimiento del otro.
Fundada por EFRAIN BOGLIETTI nace en Resistencia, otra organización clave para conocer parte de la historia reciente del chaco “COPROAR”: Comisión Pro Arte de Resistencia, en mayo de 1977.
Cuyo primordial objetivo fue emplazar esculturas a lo largo y a lo ancho de la ciudad. Formaban parte de su Comisión Directiva el arquitecto Alberto Vázquez (Supercemento) Alberto Coco Celada, entre otros.
“COPROAR” es el organizador del 1er Concurso Nacional de Escultura en Madera, que se realiza en la Plaza 25 de Mayo, en junio de 1988.
Entre 1977 y 1988 COPROAR llegó a reunir aproximadamente 107 esculturas, la mayoría de ellas por compras y otras por donaciones. que se fueron emplazando en la ciudad.
En noviembre de 1989 nace la “FUNDACIÓN URUNDAY” de la cual EFRAIN BOGLIETTI es miembro fundador.
Sus integrantes eran: Efrain Boglietti, Fabriziano Gómez, Mimo Eidman, Reynaldo Martínez, Eugenio Milani, Carlos Cuffia y Ana Maria Taiana.
En 1991 por iniciativa de Viviana y Susana Boglietti, como un homenaje a la partida de Efrain, se solicito a la Fundación Urunday, que aun tenia 30 esculturas heredadas de COPROAR sin ser emplazadas, que las sigan colocando en el espacio público, como quería su padre.
Y así se lo despidió, con una suelta de esculturas, ya que las palomas volaban de antemano junto al alma inquieta de un amante fiel a su querida ciudad.

LEONARDO GOTLEYB / BS AS, ABRIL de 2011


viernes, 22 de abril de 2011

¿Quién es quién? Los Súperamigos del Arte Contemporaneo. 2ª Temporada

´Con esta obra queremos mostrar y decir que
´el arte es un estado de encuentro'
Luz Vidal y Perro Verde ( Alberto Sassano)



 

La producción conjunta de ambos, por un proceso de mutación se ha convertido en la de un Tercer Artista.
( ver muestra)

Los Súper Amigos del Arte Contemporáneo forma parte de un trabajo en proceso en el que los artistas se resisten a considerar a su obra como una mera producción de objetos y como señala una de las consignas esgrimidas por el Tercer Artista : “ creando formas de vida que generan formas de arte”, afirman, como gesto vital, un renovado pacto personal y colectivo.

El álbum de figuritas de los Súper Amigos del Arte Contemporáneo y las figuritas se podrán adquirir también en las Galerías Pasaje 17, Perro Verde, Rubbers, Aldo de Sousa y Elsi del Río.

IMPRESIONES DE UNA PSICOANALISTA: Puntualizaciones sobre la repetición en la obra de LOUISE BOURGEOIS.



Foto de Aníbal Garfunkel, artista visual.

En el marco de la visita a la muestra “El retorno de lo reprimido” (con sede en Fundación PROA) de la artista franco-estadounidense Louise Bourgeois -junto al artista visual Aníbal Garfunkel y Arsomnibus-, el periodista Juan Calegari me convocó para escribir unas líneas sobre esta singular artista.

Enfrentarme con esta demanda, puso a circular inquietudes que tenía sobre su vida y obra. Por el carácter inagotable de las mismas, hice un recorte sobre la cuestión de la repetición que atraviesa toda la obra de Bourgeois.

Transitar por esta muestra, inaugura un tiempo para la reflexión ya que la artista utiliza como material de trabajo temas que movilizan por ser concernientes a la naturaleza humana. Bourgeois se sirve de sus miserias y de su dolor, la angustia opera como motor de su proceso creativo.

Al respecto, Freud nos dice en su artículo “Múltiple interés del Psicoanálisis. El interés del Psicoanálisis para la Estética”, que el ejercicio de la actividad artística se dirige a mitigar los deseos insatisfechos, lo que sucede tanto en el artista creador como en el espectador de la obra de arte. Las fuerzas impulsoras del arte son aquellos mismos conflictos que conducen a otros individuos a las neurosis y han movido a la sociedad a la creación de sus instituciones. Lo que se liga íntimamente con la frase de la artista, “el arte es garantía de cordura”.

El artista presenta realizadas sus fantasías vía una transformación que encubre lo revulsivo de sus deseos insatisfechos, ateniéndose a normas estéticas, ofreciendo al público un goce artístico. De esto habla en parte su obra “The Destruction of the Father (La destrucción del padre)”, donde Bourgeios destruye a su padre en la fantasía, dada la rivalidad instalada frente a la figura paterna.

Lo que se desprende de la obra de Louise Buorgeios, es una trama conflictiva que gira en torno a temas que se repiten una y otra vez de un modo compulsivo y así se perpetuán al infinito. A saber, las temáticas que aborda son: el manejo de la libido y la agresión, la ambivalencia afectiva (rasgo que se repite por excelencia), la dialéctica de las identificaciones con las figuras parentales, la maternidad, la culpa y el centro de la escena la ocupan sus temores, miedo que es la contracara del deseo. Esto deja entrever cómo las pasiones del ser (amor-odio-ignorancia), ponen de manifiesto las resistencias que impiden al sujeto acceder a su deseo y por lo tanto lo retienen.

Tal como lo señalara Philip Larrat-Smith, Curador de la mencionada muestra, “… el artista es también una suerte de atormentado Sísifo, condenado a repetir el trauma infinitamente a través de la producción artística”. En efecto, la repetición es un concepto fundamental en Psicoanálisis -tanto de la teoría como de la praxis- y es en esa praxis donde Freud advierte por primera vez la repetición y la describe en su texto “Recordar, repetir y elaborar”. En su escrito, “Mas allá del principio de placer” introduce el concepto de pulsión de muerte que construyó a partir de su lectura de la compulsión a la repetición. Por su parte, Lacan en el seminario “La lógica del fantasma” piensa el estatuto de la repetición como constituyente del sujeto mismo y la articula en relación al acto. El recorrido mínimo que describí sobre este concepto, requiere de la lectura respetuosa de dichos textos y de otros que le dan sustento teórico pero no voy a detenerme en esto en esta oportunidad.

Ahora bien, en la obra de Louise Bourgeois la repetición se despliega en sus sueños, escritos personales, esculturas, dibujos, acuarelas, etc. Dado que el inconsciente no resiste, sino que repite, insiste en manifestarse. En palabras de Bourgeois “Un tema me atrapa y entonces hago bocetos y dibujos. Eso significa que la obsesión durará varios meses. Después desaparece y reaparece años más tarde. Nunca me siento totalmente satisfecha. Si lo estuviera, dejaría de trabajar y sería muy feliz”. De este modo, intenta dominar sus conflictos, repite como “modo de hacer” con la angustia.

El inconsciente sólo pide hablar y nos entrega sus formaciones: sueños, síntomas, fantasías, etc., nombradas como el retorno de lo reprimido (debido al fracaso de la represión). El material reprimido sólo puede retornar a la consciencia a condición de ser deformado –por efecto de la censura-, es decir velo mediante, un disfraz que proteja al yo frente a la angustia.

En síntesis, la muestra “El retorno de lo reprimido” invita al espectador a ser partícipe de las escenas de la vida privada de la artista y zambullirse en las profundas aguas de su inconsciente. Sus obras hacen las veces de un gran espejo en el que nos reflejamos, y sin lugar a dudas nos moviliza ver lo que este espejo nos devuelve de nosotros mismos.

Por último hay una cuestión que me parece interesante enunciar: el inconsciente está estructurado como un lenguaje afirma Lacan, un lenguaje que no muere nunca por lo que el inconsciente cobra una dimensión atemporal donde convive lo infantil con lo adulto. Así, pasado y presente aparecen engarzados en el hilo del deseo que pasa a través de ellos.

                                                         Ver Video. Producción KONIEC




sábado, 9 de abril de 2011

Impresiones de un Artista : Del Caos al Orden en la obra de Louise Bourgeois.

Louise Bourgeois: el retorno de lo reprimido
Curador:Philip Larratt-Smith
ver muestra>>

Fundación Proa
Del 19 de Marzo al 19 de Junio
Entrada: $ 10.- Est $ 6.- Jub $ 4.

Recién llegado de San Luis a Buenos Aires y luego de estar ausente 50 días de la escena porteña, el artista visual Aníbal Garfunkel recorrió durante dos horas junto a Arsomnibus, una psiconalista -la licenciada Paola Calcerano- y el soporte fotográfico de Juan Cruz Lobo, la impresionante muestra de la franco estadounidense Louise Bourgeois, que hace días se inauguró en la sede de la Fundación Proa en la Boca, a metros del Riachuelo y de la inefable Vuelta de Rocha.
Estas son las algunas de las impresiones de nuestros invitados especiales, ante las 85 obras que integran una mega exposición excepcional, titulada "Louise Bourgeois: el retorno de la reprimido", que clausura al público el 19 de julio.

Hubo asombro y silencios, entre la marea de argentinos y extranjeros -estuvimos los cuatro, un domingo por la tarde- que visitan diariamente la muestra (menos los lunes) ; y Garfunkel -quien en mayo próximo expondrá su propia producción artística, dentro del espacio Barrio Joven, que todos los años arteBA brinda a los artistas- varió varias veces su estado de ánimo, ante la mirada absorta de quienes transitan las cuatro salas de Proa destinadas a la obra de la artista.
"Veo gran autenticidad en el trabajo de Borugeois, porque ella moldea desde sí misma y desde una situación personal una obra que nos permite meternos en un rincón de su cabeza, creando imágenes de gran naturalidad artística, con una técnica admirable".

"Hay cierto encanto en lo siniestro y la brutalidad, sobre todo en el manejo de los materiales que utiliza para componer objetos de arcilla, modelados con absoluta maestría, donde trabaja mucho lo interno, lo hueco y el agujero que parece sustentar la realidad".
"Por eso es una obra muy contemporánea y coherente representativa del mundo en que vivimos".
"Me impresiona muchísimo Maman, esa escultura monumental que vimos al principio, porque la famosa araña guarda nueve huevos de purísimo mármol blanco, que -a mi juicio- están emparentados con los nueve meces de gestación de la mujer".

"Es como si la artista misma hubiese tejido tramas y redes, nutriéndose de distintos estilos estéticos, para significar una única y particular forma de hablarle al público y de transmitirle sus entrañas y su perturbante mundo interior".

"Creo que su máxima -inconsciente quizás- fue: dibuja tu mente y pintarás la de las demás".
"Todo lo que vemos aquí hoy, es como sueño atrayente y a la vez escabroso, porque nos toca desde lo más profundo del ser y donde el cuerpo humano -protagonista principal de su obra- está visto (y decapitado), como un tejido más de la vida y de las cosas de este mundo, que a todos nos angustia".
"Es admirable la libertad con que trabaja y elabora técnicamente su obra y la carencia de preconceptos para expresar el resultado artístico de su labor".
"La elección de materiales como el bronce, el mármol y el acero inoxidable denotan la pureza y solidez de sus creencias, y el amor y preciosismo técnico con que arribaba a ellos"
"Bourgeois nos transmite visiones de un mundo inexorable, donde hay que aceptarnos como somos y donde la realidad permanentemente contribuye a deformarnos y , nuevamente, a formarnos como finalmente somos. En definitiva, yo creo que la artista nos quiere decir que la realidad es mucho más compleja que una mera deformación, llamémosla equilibrada, de sí misma".
"Todas son imágenes muy potentes y, viéndolo bien, sus inquietantes arañas, si bien tienen su parte fuerte, a mí se me representan bastante amigables y generosas con el paisaje ".
A todo esto, hay que decir que a Garfunkel y a Paola Calcerano, a veces les faltó el aire cuando vieron la muestra de L.B. ( y que todos respiramos aliviados cuando salimos de nuevo a la calle), porque no dejaron de sugerir durante la recorrida, que sentían el conjunto de la obra concebida en un clima de bárbaro y tenebroso nerviosismo; y no en el sutil y estrecho desfiladero de la paz, que la artista -parece- nunca transitó.
Claro: nuestra vivienda -el cuerpo- es una ruina insegura nos sugiere L.B. en esta exposición, porque su mano nunca negoció con los dioses y demonios de la moderna sociedad estadounidense, donde desarrolló gran parte de su vida.
Esta obra (cada una de ellas), seguramente explotó por los poros de la artista, que nunca desestimó sus vínculos con el psicoanálisis y su parentesco con el surrealismo de postguerra.
Tal vez, hay mucho de arrojo íntimo y personal y no de arrepentimiento: puro talento en manos de esta artista única que, durante muchos años de su extensa vida pagó el precio del silencio de la crítica mundana.
Tal vez, sus propios pecados y bendiciones se entremezclaron en la charla que tuvimos con Garfunkel y Calcerano.

Ella murió hace poco, a los 83 años, entre la tierra y el cielo, finalmente consagrada por la copiosa y para nada obsecuente crítica internacional que, curiosa y paradójicamente, antes -años atrás- la había ignorado y pasado por alto; como una de las más grandes, prolíferas y por cierto, temibles ( como la famosa, fabulosa y mortuoria araña, símbolo hermenéutico y alter-ego de la mega mater tejedora y protectora, que ahora está en Buenos Aires y que luego viajará directamente a New York ) manifestaciones artísticas del siglo XXI que, -obviamente- no la había visto nacer, pero sí crecer hasta el límite de la vejez y bucear en el -para ella- inescrutable y frenético destino humano.
Finalmente, Maman -de 22 toneladas de bronce- cumple varias funciones. Es, literalmente, el mascarón de Proa, porque da al sin igual y turbio río ( que nadie pintó mejor que don Quinquela Martín y se impone siniestramente a la entrada de la Fundación, donde hoy yace instalada parte importante de la obra de L. B. , como un único y gestual objeto creativo y tan elocuente, porque pareciera que desde el más allá habla por sí misma ( la artista); y también porque precisamente y preciosamente precede y antecede ( al aire libre ) la entrada de la muestra. Justamente, el renombrado artista boquense parece guiarnos aquí y allá, desde lo agrio del paisaje pictórico que lo vio nacer manifestarse y morir , hasta la cima de otro arte (el de L. B.) que reclama (a gritos luz), gran parte de lo que el arte contemporáneo nacional e internacional alberga y contiene de estupor y, de hediondo hondo, fondo ( olor) a fango.
Claro: hay algo que une y despiada a la artista con el mítico universo natural y putrefacto ( el de este río), que sin lugar a dudas nos inclina a pensar la vida y el arte moderno, como dos caras de una misma moneda, donde sufrimiento y felicidad se alzan en gestación, para soportar el titánico y mitológico esfuerzo cotidiano que hace la humanidad para seguir con vida.